La realidad de las adicciones en mujeres es un tema que ha sido subestimado y pasado por alto a lo largo de la historia.
En la actualidad, el número de mujeres que luchan contra alguna adicción ha aumentado de forma notable. Es importante destacar que las adicciones de las mujeres pueden ser distintas a las de los hombres con respecto a las sustancias a las que están expuestas, como también en los factores que contribuyen a su desarrollo.
En las mujeres, las adicciones al alcohol y a las drogas se desarrollan como una manera de afrontar problemas como el estrés, la ansiedad, la depresión o los traumas pasados.
Además, las mujeres se ven influenciadas por factores sociales y culturales, por ejemplo, la presión de la sociedad para mantener una imagen perfecta o cumplir con los roles de género tradicionales. Por otro lado, las mujeres son más propensas a sufrir episodios de violencia doméstica, abuso sexual y trauma psicológico. Esto aumenta su vulnerabilidad a las adicciones.
Otro aspecto relevante que destacamos sobre la realidad de las adicciones en mujeres, es que enfrentan barreras adicionales para buscar recuperación y tratamiento. Estas barreras incluyen la falta de acceso a servicios de salud y tratamiento especializado o la responsabilidad de cuidar a los hijos o familiares. Desde luego, estas barreras dificultan el proceso de recuperación y logran que las mujeres se sientan atrapadas en un ciclo de adicción. Esto lo saben bien los profesionales de Dona Adicciones, como Nuria, directora terapéutica y especialista en adicciones en mujeres.
Es crucial abordar estas barreras y comprender las necesidades específicas de las mujeres para ofrecerles la ayuda y el apoyo adecuado. ¿Qué implica esto? Esto supone proporcionar servicios de salud mental y tratamientos especializados que tengan en cuenta los factores de género. También supone ofrecer un entorno seguro y libre de juicio donde busquen ayuda sin tener temor a las consecuencias negativas.
Doble estigma: desmitificando los mitos sobre las adicciones en mujeres
La realidad es que las adicciones no distinguen género, y las mujeres también se pueden ver afectadas por distintos tipos de adicciones. Existen ciertos mitos comunes sobre las adicciones en mujeres que hay que desmitificar. Vamos a ver alguno de ellos:
- Las mujeres no se vuelven adictas. Es uno de los mitos más erróneos y usuales. Las mujeres son propensas a desarrollar adicciones al igual que los hombres. Y es que, las adicciones no discriminan y pueden afectar a cualquier persona, sin importar cuál sea su género.
- Las mujeres solo son adictas a las drogas recetadas. Sí, es cierto que las mujeres pueden abusar de medicamentos recetados, pero también se pueden volver adictas a otras sustancias, como el alcohol, el tabaco o la marihuana, entre otras.
- Una adicción en las mujeres es menos grave. La verdad es que no hay una distinción entre la gravedad de las adicciones entre hombres y mujeres. Tanto unos como otros sufren las consecuencias negativas de una adicción a las sustancias, como problemas de salud o laborales.
- Las mujeres solo se vuelven adictas a las sustancias. La adición de las mujeres a determinadas sustancias es habitual, pero pueden desarrollar otras adicciones comportamentales, como el juego, la comida o el ejercicio excesivo.
- Las mujeres pueden controlar su adicción de manera sencilla. Este es otro mito sobre la realidad de las adicciones en mujeres. ¿Por qué? Porque la adicción es una enfermedad compleja que requiere de tratamiento y apoyo para superarla.
- Una adicción en mujeres es solo el resultado de traumas o abusos. El riesgo de experiencias traumáticas aumentan la probabilidad de desarrollar adicciones, pero no todas las mujeres con adicciones han experimentado traumas o abusos. Y es que, las adicciones son multifactoriales y están influenciadas por una combinación de factores ambientales, genéticos y psicológicos.
Un futuro libre de adicciones: recursos y esperanza para mujeres
En España existen diferentes recursos disponibles para mujeres con adicciones. Estos recursos son públicos o privados, y ofrecen numerosos servicios, como tratamiento, apoyo y prevención.
Respecto a los recursos públicos, el Gobierno de España ofrece gran cantidad de recursos para mujeres con adicciones, mediante el Plan Nacional sobre Drogas (PND). Estos recursos son: centro de atención a la drogodependencia (CAD), que ofrecen tratamientos para las adicciones, tanto individuales como grupales. También servicios de prevención familiar indicados, (SPI) y planes locales sobre drogas.
Terminamos este artículo afirmando que la realidad de las adicciones en mujeres es compleja y multifacética. Es fundamental reconocer las diferencias en términos de las sustancias que utilizan, los factores que contribuyen a la adicción, así como las barreras para encontrar apoyo y ayuda. Solo mediante la comprensión completa de estas complejidades podemos ofrecer el apoyo necesario a las mujeres que están luchando contra las adicciones, y ayudarlas en su camino hacia la recuperación.
Es importante desmitificar los conceptos equivocados sobre la adicción en mujeres para promover una comprensión adecuada de la problemática y garantizar que todas las personas tengan acceso al tratamiento y apoyo necesario.