Imagina que tienes la opción: puedes continuar con tu rutina diaria y hacer lo que siempre has hecho y mantener tu ritmo. O siempre obtienes desafíos emocionantes. ¿Lo aceptarías? ¿O tienes miedo de las dificultades que puedan surgir en tu camino? Si es así, deberías superar este miedo. Esto te permite asumir desafíos y adquirir nuevas experiencias .
¿Por qué los desafíos son tan importantes para ti?
¿Qué haces cuando te asignan una tarea que excede todo lo que has hecho antes? ¿Qué representa un verdadero desafío para ti? ¿Pero uno que también puede cambiar tu vida? La elección es tuya: puedes encontrar una excusa y seguir haciendo sólo el trabajo o los proyectos a los que estás acostumbrado. Por supuesto, este es un entorno muy cómodo, pero sobre todo muy seguro . Porque si no haces nada inusual, nada puede salir mal. No puedes fracasar ni fracasar, sino permanecer en tu camino habitual.
Pero con esta actitud también se pierde mucho. Especialmente cuando aceptas desafíos y te enfrentas constantemente a cosas nuevas, aprendes. Obtienes nuevas experiencias y permaneces flexible. Te beneficias al máximo de esto. También ganarás confianza adicional en tí mismo cuando domine con éxito situaciones nuevas. Pero, ¿Cómo consigues saltar tu sombra y afrontar retos que antes te habías reprimido? La coaching Vanessa Alves Ruiz nos indica unas pautas:
6 consejos para afrontar los desafíos
1. Mírate a ti mismo bajo la luz adecuada
Mucha gente tiende a esconder su luz debajo de un almud. Te subestimas a ti mismo y eres tu mayor crítico. Básicamente, están insatisfechos consigo mismos y con su desempeño, se presentan negativamente y practican esta autocrítica en forma de diálogo interior, un diálogo interno completamente negativo.
El resultado: estas personas se desmotivan y, por supuesto, es bueno sentir lástima de uno mismo de vez en cuando. Pero a la larga, uno mismo se cree malo y fracasado. Detén estos pensamientos negativos contrarrestándolos con un “sí, pero” : “Sí, ese puede ser el caso. Pero recientemente lo logré con éxito…” y luego enumera tus éxitos. Piensa siempre en estos aspectos positivos y no en posibles fallos.
2. Trátate bien
Que estés motivado también depende de cómo te trates a ti mismo. Si constantemente te dices a ti mismo que no puedes hacer nada, que no eres bueno, que no puedes hacer nada, a la larga lo creerás. Entonces te sentirás en consecuencia: un fracasado, una persona pequeña y fea.
Sé honesto: no tratarías así a otra persona. No te atrevería a a “golpearlo en la cabeza” una y otra vez. Entonces, ¿por qué actúas de esta manera contigo mismo? Sé amable contigo mismo para fortalecerte. Por ejemplo, puedes saludarte de forma amistosa frente al espejo por la mañana.
3. Asume la responsabilidad, ¡pero no demasiada!
Por supuesto, puede suceder que tengas que responsabilizarte de un error. Somos humanos y los humanos cometemos errores. Entonces debes ser honesto con ellos y asumir la responsabilidad de ellos. Después de todo, puedes aprender de los errores.
Sin embargo, no te culpes por todo lo que sucede. No importa si la persona con la que estás hablando de repente ya no es tan amigable contigo como antes, si un conocido cancela una cita contigo o si no recibes un pedido. Las razones de esto pueden ser variadas. No tienes por qué ser que tú seas el culpable directo. Recuerda que no tienes por qué ser todo acerca de ti.
4. No te tomes demasiado en serio
Por más difícil que pueda resultar a veces, intenta no tomarte a ti mismo tan en serio. Si cometes un error o tienes un percance, intenta afrontarlo con humor. Ríete del descuido y luego olvídalo.
Notarás que todos los demás normalmente olvidarán rápidamente tu pequeña torpeza. ¿Por qué deberías tenerlos presentes durante mucho tiempo y recordárselos una y otra vez?
5. Las experiencias negativas no deben prevalecer
Imagínate comprar algo online por primera vez y que te estafen bienes y dinero. O alguien te roba todos tus documentos mientras estás de vacaciones. Una reacción humana típica es evitar este tipo de situaciones. La razón: los humanos tendemos a generalizar las experiencias. Declaraciones como: “En Internet sólo hay estafadores” o “En este destino no puedes irte de vacaciones con seguridad”. De esta manera, puedes tachar ciertas actividades o cosas de tu “lista de vida” debido a experiencias negativas individuales y evitarlas en el futuro.
Cuanto más te restringes así, más aburrida se vuelve tu vida. En algún momento lo notarás cuando dejes de ir de vacaciones, evites por completo los nuevos medios y simplemente te sientes frente al televisor todas las noches. Por otro lado, si tachas tus experiencias negativas como un incidente aislado, seguirás manteniendo abiertas todas las apasionantes posibilidades que te ofrece la vida.
6. Así te animas
No digas inmediatamente “no puedo hacer eso”, sino mira lo que no puedes hacer o lo que no corresponde al 100% a tus habilidades como un desafío. Acércate a la tarea con una actitud de “lo intentaré”. Déjate claro que definitivamente ganarás experiencia y aprenderás a reevaluar tus habilidades.
También tienes la oportunidad de aprender cosas nuevas y mejorar. Si descubres que aún no cuentas con todos los requisitos para dominar la tarea, no temas pedir ayuda. Haz preguntas, infórmate de lo que no sabes, porque así aprendes más.