Las carillas son unas finas láminas que se colocan en la cara frontal de los dientes para mejorar la estética dental de manera relativamente sencilla y eficaz. Este tratamiento permite solucionar varios problemas como dientes torcidos, astillados o manchados. Desde el Consejo General de Dentistas explican que este tratamiento también trata la separación entre los dientes, es decir, los diastemas.
Los materiales con los que se fabrican las carillas dentales son traslucidos y de un mínimo grosor, lo que permite conseguir resultados muy naturales. Las carillas de porcelana son muy populares porque destacan por su translucidez, comodidad y ofrecen un aspecto muy natural. La porcelana es un material que ofrece buena durabilidad, porque es resistente a la rotura y desgaste.
Este tratamiento ofrece múltiples beneficios pero podemos someternos a un tratamiento de carillas si tenemos una buena salud bucal en general, es decir, si no tenemos ninguna patología ni problemas de alineación. Si en la consulta el especialista descubre que tenemos problemas severos de alineación, no podremos recurrir a las carillas y deberemos optar por un tratamiento de ortodoncia. En la primera revisión, el especialista revisa la cavidad oral y para ello, utiliza el escáner intraoral. El objetivo es comprobar el estado bucodental y diseñar unas carillas personalizadas.
¿Es importante utilizar la tecnología para realizar este tratamiento?
Es fundamental incorporar las nuevas tecnologías en el ámbito de la odontología para mejorar la eficacia de los resultados y obtener diagnósticos mucho más precisos. El uso de software de diagnóstico bucodental de alta precisión es fundamental para diseñar digitalmente el tratamiento y conseguir unas carillas a medida. El escáner intraoral es un dispositivo que permite obtener y reproducir imágenes en tres dimensiones, a color y de alta precisión de los dientes y la boca.
Este aparato se compone de una pequeña cámara y un software muy avanzado, y permite revisar las imágenes en el monitor. El especialista debe situar la cámara intraoral justo frente a nuestra boca y mover lentamente la cámara por encima de los dientes y de las encías, para realizar un tratamiento de forma mucho más rápida y eficaz que mediante otros métodos de exploración.
Los dentistas de clínica García Lorente, especialistas en estética dental, nos explican que el escáner intraoral resulta muy útil para tratamientos de ortodoncia y carillas dentales, ya que esta tecnología puede crear un documento en formato digital con la representación tridimensional de la boca, permite la visualización previa del resultado antes de comenzar con el tratamiento y una vez decidido el diseño el odontólogo simulará el resultado digitalmente.
¿Cuáles son las ventajas de las carillas dentales?
Las ventajas y los problemas que soluciona el tratamiento de carillas son:
-Personalización: las carillas se diseñan a medida y podemos elegir el diseño y el tono de las piezas dentales.
–Proceso inmediato: el proceso de adaptación a este tratamiento es inmediato, por lo que podemos comer y hacer vida normal tras salir de la clínica dental.
-Resistentes: un tratamiento de carillas dentales colocado por un profesional experto, puede durar muchos años en buen estado, ya que las carillas de porcelana son las más resistentes y suelen durar entre 10 y 15 años. En el caso de las de composite, se mantienen entre 5 y 10 años. Aunque la durabilidad dependerá de la calidad del tratamiento de y de los cuidados posteriores, por lo que debemos cuidar nuestra higiene diaria y cumplir con las revisiones periódicas con el dentista. Cuando los odontólogos colocan las carillas, recomiendan que se tomen una serie de medidas preventivas para cuidarlas adecuadamente y revisarlas al menos cada 6 meses.
–Mejora el aspecto de la sonrisa: este tratamiento puede cambiar el color de los dientes, tapar imperfecciones o fracturas, corregir la forma de los dientes, cerrar pequeños huecos entre las piezas, enmascarar coloraciones y manchas, etc.
–Mejora la autoestima: este tratamiento mejora la autoestima porque evita la sensación de vejez dental, y cambia la forma y la posición de las piezas. Además, ayuda estéticamente a los problemas derivados de la periodontitis.
–Tratamiento mínimamente invasivo: otra de las ventajas es que vamos a notar muy poca molestia. El tratamiento con carillas no genera dolor, aunque el dentista puede recurrir a la anestesia dental si notamos cierta molestia. Es poco invasivo porque debajo de la carilla se mantiene la pieza dental sin alteración.
Si queremos mejorar la forma y posición de las piezas, debemos apostar por este tratamiento de estética dental. Aunque para conseguir los mejores resultados, debemos contar con el asesoramiento de expertos en carillas dentales, porque tienen experiencia y una formación adecuada.
