Los diagnósticos dobles o duales son comunes. Aproximadamente el 40% de las personas con problemas con el alcohol tienen un trastorno mental independiente de la sustancia en algún momento de sus vidas. Para las personas con problemas de drogas, la cifra supera el 50 %. La prevalencia también se puede ver al revés. Aproximadamente el 30% de las personas con trastornos mentales también tienen un trastorno por abuso de sustancias en algún momento de sus vidas. La cifra varía considerablemente en los diferentes trastornos mentales. Por ejemplo, aproximadamente la mitad de la esquizofrenia o el trastorno bipolar también tienen un trastorno por abuso de sustancias en algún momento.
Vamos a ver en qué consiste un tratamiento para un diagnóstico dual de adicción y trastorno mental:
Relación entre adicción y trastorno mental
Un trastorno mental puede ser, por ejemplo, un trastorno del estado de ánimo, un trastorno de ansiedad, un trastorno de la personalidad o un trastorno psicótico. Los síntomas psiquiátricos de un paciente con un doble diagnóstico no desaparecen incluso después de un largo período de sobriedad.
Los intoxicantes pueden causar una variedad de síntomas psicológicos. Por ejemplo, el alcohol puede causar síntomas notables de depresión y ansiedad. Sin embargo, con el fin del abuso de sustancias, estos síntomas desaparecen con mayor frecuencia en un mes. En este caso, el tratamiento del trastorno por abuso de sustancias es una prioridad.
Por el contrario, en el abuso concomitante de sustancias y el trastorno de salud mental, es decir, el diagnóstico dual, existe un trastorno mental independiente de los efectos inmediatos del abuso de sustancias (uso, abstinencia) además del trastorno por uso de sustancias.
Causas de un diagnóstico dual
Existen diferentes causas, como trastornos hereditarios, ansiedad, traumas, depresión, estrés postraumático (TEPT), etc. El paciente recurre al alcohol y a la ingesta de sustancias como medio de escape temporal.
¿En qué consiste el tratamiento para un diagnóstico dual de adicción y trastorno mental?
Según han indicado los profesionales de tratamientos de adicciones Despierta, en el tratamiento de un paciente con un diagnóstico dual, se presta atención al tratamiento tanto del trastorno por abuso de sustancias como del trastorno mental. El abuso de sustancias a menudo mantiene o empeora los síntomas psicológicos de un paciente de diagnóstico dual, por lo que el tratamiento del trastorno por abuso de sustancias es importante y, a menudo, una prioridad para ellos también.
Se necesita un período suficientemente largo de tratamiento libre de intoxicantes para determinar la existencia y la naturaleza de un trastorno mental no intoxicante. Además, el tratamiento de muchos trastornos mentales no tendrá éxito de la mejor manera posible sin que el trastorno por abuso de sustancias se controle adecuadamente. El uso de sustancias puede causar tratamiento farmacológico o terapia para no aliviar la depresión o la ansiedad.
En el diagnóstico doble o dual, en el tratamiento de un trastorno mental, se utilizan los mismos métodos que para aquellos que no tienen un problema de abuso de sustancias. Sin embargo, se evitan las drogas adictivas. A menudo, los síntomas psicológicos de los pacientes con diagnóstico dual son más difíciles al inicio del tratamiento que en aquellos que no tienen un trastorno por uso de sustancias. Sin embargo, los tratamientos alivian los síntomas por igual en ambas situaciones.
Tipos de tratamientos y terapias para un diagnóstico dual
En el tratamiento de pacientes con diagnóstico dual han prevalecido los patrones de tratamiento intermitente y paralelo, cada uno con dos entidades de tratamiento.
En el modelo intermitente, primero se trata otro trastorno (por ejemplo, el trastorno por abuso de sustancias en una clínica de abuso de sustancias) y cuando el tratamiento ha logrado un resultado de tratamiento suficientemente bueno, se inicia el tratamiento del segundo problema (por ejemplo, depresión en una clínica psiquiátrica ambulatoria).
El modelo de tratamiento paralelo, por otro lado, trata ambos problemas al mismo tiempo, pero hay un tratamiento separado para cada trastorno. Cada vez más, el llamado modelo de diagnóstico dual se ha utilizado como modelo de tratamiento para los pacientes. atención integrada. En él, el mismo grupo de trabajo se ocupa de ambos problemas. Especialmente en los trastornos mentales más graves, a menudo se requiere un tratamiento integrado.
Las terapias empleadas por lo profesionales para el tratamiento de un diagnóstico dual son:
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Desintoxicación: El primer paso, que puede ser un obstáculo importante, implica detener el uso de las sustancias y eliminarlas del sistema. El proceso de desintoxicación a menudo se lleva a cabo en un entorno hospitalario, de modo que los proveedores de atención médica pueden monitorear al paciente y proporcionar medicamentos y atención en caso de que la persona experimente síntomas de abstinencia.
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Psicoterapia: La terapia es a menudo una parte importante del plan de tratamiento. La terapia cognitiva conductual (TCC) a menudo es útil para cambiar los patrones de pensamiento poco saludables que contribuyen al uso de sustancias. Algunas personas pueden necesitar terapia intensiva inicialmente, pero una vez que controlan sus síntomas y aprenden habilidades de afrontamiento útiles, pueden reducir la frecuencia de sus sesiones de tratamiento.
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Medicación: Además de ayudar con los síntomas de abstinencia, los medicamentos también pueden ayudar con los síntomas de las afecciones de salud mental.
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Rehabilitación hospitalaria: Las personas con trastornos concurrentes pueden beneficiarse de la rehabilitación hospitalaria, donde pueden recibir monitoreo continuo y atención médica mental.
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Grupos de apoyo: Lidiar con un diagnóstico dual puede ser un desafío. Los grupos de apoyo ofrecen una vía para que las personas compartan consejos, celebren éxitos, desahoguen frustraciones, encuentren recursos y ofrezcan ayuda e inspiración.
Conclusión
Pide ayuda de inmediato si te encuentras en una espiral entre la adicción y problema mental grave, como una situación de estrés, depresión o ansiedad.
Es mejor pedir ayuda nada más detectes que te encuentras en un problema, antes de que la situación se agrave. El diagnóstico dual puede afectar a tu salud, integridad; así como en la relación con tu entorno más cercano.
Cabe señalar que la recuperación de un tratamiento de adicción es un proceso largo, que requiere constancia e implicación. Una vez recuperado el paciente, deberá tener un periodo de observación para evitar recaídas.
