No es solo estética, es salud
Seguro que más de una vez has oído hablar de la importancia de tener los dientes bien alineados, pero lo primero en lo que piensa la mayoría de la gente es en la estética. Y claro, tener una sonrisa bonita es un plus, pero la realidad es que la mala alineación dental puede generar problemas de salud bastante serios. No es solo una cuestión de apariencia; cuando los dientes no están donde deberían, pueden afectar tu mordida, desgastar los dientes antes de tiempo, provocar dolores musculares e incluso dificultar la limpieza adecuada de la boca.
El problema es que, como no siempre causa dolor inmediato, mucha gente lo deja pasar. Y con los años, esa falta de atención puede traer consecuencias serias que afectan no solo a la boca, sino a otras partes del cuerpo.
¿Por qué se tuercen los dientes?
Antes de hablar de los problemas que puede causar una mala alineación, primero hay que entender qué la provoca. Aunque la genética influye bastante, hay muchas otras razones por las que los dientes pueden torcerse con el tiempo:
- Herencia familiar: La forma y tamaño de los huesos de la mandíbula se heredan, y si no hay suficiente espacio para los dientes, se apiñan o crecen torcidos.
- Hábitos de la infancia: Chuparse el dedo, usar chupete demasiado tiempo o empujar los dientes con la lengua pueden alterar su posición natural.
- Pérdida de dientes: Si pierdes un diente y no lo reemplazas, los demás pueden desplazarse para ocupar ese espacio, alterando la mordida.
- Bruxismo: Apretar o rechinar los dientes sin darte cuenta (especialmente al dormir) puede hacer que se muevan poco a poco.
- Enfermedades de las encías: Si las encías se debilitan, pierden su capacidad de sujeción, y los dientes pueden moverse.
- Crecimiento desigual de la mandíbula: Cuando la mandíbula superior e inferior no crecen al mismo ritmo, pueden generar problemas de mordida y desalineación dental.
Problemas de salud causados por una mala alineación dental
Si tus dientes no están bien alineados, los efectos negativos no se quedan solo en la boca. La mordida desajustada y la posición incorrecta de los dientes pueden generar una serie de complicaciones que afectan tu bienestar general. Estos son algunos de los problemas más comunes:
- Dificultad para masticar: Si la mordida no es correcta, cuesta más triturar bien los alimentos, lo que puede provocar problemas digestivos. Una mala masticación hace que el estómago tenga que trabajar más para procesar la comida, lo que puede derivar en acidez, hinchazón y digestiones pesadas. Además, una alimentación inadecuada puede afectar la absorción de nutrientes esenciales.
- Desgaste irregular de los dientes: Algunos dientes soportan más presión que otros, lo que puede hacer que se desgasten más rápido. Con el tiempo, esto puede provocar sensibilidad dental, fracturas o incluso la necesidad de restauraciones dentales. En casos extremos, un desgaste excesivo puede afectar la estructura de los dientes, causando problemas en la mordida y aumentando el riesgo de caries.
- Dolores de cabeza y musculares: La mala alineación puede generar tensión en la mandíbula, lo que con el tiempo afecta a los músculos del cuello y la espalda. Muchas personas con problemas de mordida sufren cefaleas tensionales recurrentes sin saber que el origen está en su dentadura. Esta tensión puede extenderse a los hombros y la zona cervical, afectando la postura y generando molestias constantes.
- Problemas en las encías: Si los dientes están mal posicionados, pueden quedar espacios donde se acumulan bacterias, aumentando el riesgo de gingivitis o periodontitis. La inflamación de las encías no solo causa sangrado y molestias, sino que, en casos graves, puede derivar en la pérdida de dientes. Además, se ha demostrado que las enfermedades periodontales pueden estar relacionadas con problemas cardiovasculares.
- Dificultad para hablar: En algunos casos, una mala mordida puede afectar la pronunciación de ciertos sonidos. Si los dientes no están bien alineados, pueden dificultar el movimiento de la lengua al hablar, causando problemas de dicción. Esto puede generar inseguridad al comunicarse y afectar la confianza en situaciones sociales o laborales.
- Trastornos de la articulación temporomandibular (ATM): Una mordida desajustada puede causar molestias, dolor y hasta bloqueos en la articulación que une la mandíbula con el cráneo. Estos trastornos pueden provocar chasquidos al abrir y cerrar la boca, dificultad para masticar y, en algunos casos, episodios de dolor crónico. En situaciones graves, el ATM puede limitar el movimiento de la mandíbula, afectando la calidad de vida de la persona.
Buscando soluciones
Si notas que tienes los dientes desalineados, no te preocupes, hay soluciones. Desde la Clínica Dental Arturo Soria, en Madrid, nos cuentan que hoy en día existen distintos tipos de ortodoncia para corregir este problema. Veamos cuáles son las opciones más utilizadas y qué ofrecen:
Brackets metálicos
Son los más tradicionales y efectivos. Se componen de pequeñas piezas metálicas pegadas a los dientes, conectadas por un arco que aplica presión para moverlos. Son resistentes y su precio suele estar entre los 2.500 y 3.500 euros, dependiendo del caso. Aunque son los más visibles, su eficacia los hace una opción ideal para casos más complejos. Además, los avances tecnológicos han reducido el tamaño de los brackets, haciéndolos más cómodos y discretos de lo que solían ser.
Brackets estéticos
Funcionan igual que los metálicos, pero están hechos de materiales como cerámica o zafiro, lo que los hace menos visibles. Son ideales si te preocupa la estética, aunque son un poco más caros, costando entre 3.000 y 4.500 euros. Su ventaja es que se mimetizan con el color de los dientes, reduciendo el impacto visual. Sin embargo, requieren un mayor cuidado para evitar manchas o desgaste en el material, y pueden ser ligeramente más frágiles que los metálicos.
Ortodoncia lingual
Estos brackets se colocan en la parte interna de los dientes, por lo que son prácticamente invisibles. Sin embargo, pueden ser incómodos al principio y su precio es más elevado, rondando los 4.000 a 6.000 euros. Son una excelente opción para quienes desean corregir su sonrisa sin que se note que llevan ortodoncia. Sin embargo, requieren una mayor adaptación, ya que pueden afectar temporalmente el habla y la higiene bucal es más difícil debido a su ubicación.
Alineadores transparentes (Invisalign)
Son férulas de plástico transparente que se cambian cada dos semanas para mover los dientes progresivamente. Son cómodos y casi imperceptibles, pero requieren constancia. Su precio varía entre 3.500 y 6.500 euros, según el número de alineadores necesarios. Su gran ventaja es que se pueden quitar para comer y cepillarse los dientes, facilitando la higiene bucal. Sin embargo, deben usarse al menos 22 horas al día para ser efectivos, por lo que requieren compromiso por parte del paciente.
Consejos para cuidar tu ortodoncia
Si decides corregir la alineación de tus dientes, es importante seguir estos cuidados básicos para evitar problemas:
- Limpieza constante: Cepíllate después de cada comida y usa hilo dental especial para evitar que se acumulen restos de comida. La ortodoncia puede favorecer la retención de placa bacteriana, por lo que es fundamental mantener una higiene rigurosa. También se recomienda el uso de cepillos interproximales y enjuagues bucales específicos para ortodoncia.
- Evitar ciertos alimentos: Nada de chicles, caramelos pegajosos o alimentos muy duros que puedan dañar los aparatos. Morder hielo, frutos secos o pan demasiado duro puede provocar que los brackets se despeguen o que los alineadores se deformen. También es recomendable evitar bebidas azucaradas para prevenir la aparición de caries.
- Uso de cera dental: Si los brackets rozan y generan molestias, puedes usar cera dental para aliviar la irritación. Esta cera se coloca sobre las zonas que causan fricción, reduciendo las molestias y evitando la formación de llagas en la boca. Con el tiempo, la boca se acostumbra a la ortodoncia y la necesidad de cera disminuye.
- Acudir a las revisiones: Es fundamental visitar al ortodoncista periódicamente para hacer ajustes y asegurarse de que todo avanza bien. Cada tipo de ortodoncia requiere un seguimiento específico para garantizar que el tratamiento sea efectivo. Saltarse las citas puede retrasar el proceso y aumentar el tiempo necesario para obtener los resultados deseados.
Siguiendo estos consejos y eligiendo el tratamiento adecuado, puedes corregir la alineación de tus dientes y mejorar tanto tu salud bucal como tu calidad de vida.
¿Los dientes se vuelven a torcer después de la ortodoncia?
Sí, puede pasar. Después de retirar los aparatos, los dientes tienden a moverse porque los tejidos de la boca tardan en estabilizarse. Para evitarlo, los ortodoncistas recomiendan el uso de retenedores, que pueden ser:
- Fijos: Una pequeña barra metálica pegada detrás de los dientes.
- Removibles: Férulas de plástico transparente que se usan durante la noche.
Cuidados post ortodoncia para evitar que los dientes se muevan
Después del tratamiento, es clave seguir estos cuidados:
- Usar el retenedor según las indicaciones del ortodoncista.
- Mantener una buena higiene bucal para prevenir problemas en las encías.
- Ir a revisiones periódicas para asegurarte de que los dientes no están volviendo a moverse.
- Evitar hábitos dañinos como morder objetos o apretar los dientes.
Ponle solución
La mala alineación dental no es solo un tema estético, es una cuestión de salud que puede afectar desde la masticación hasta la postura y provocar problemas a largo plazo. Afortunadamente, la ortodoncia ofrece soluciones efectivas para corregirlo y evitar complicaciones futuras. Si notas que tus dientes no están bien alineados, lo mejor que puedes hacer es acudir a un especialista. Tu boca (y tu salud en general) te lo agradecerán.