10 consejos para comenzar a ir al gimnasio

Si quieres ponerte en forma, adelgazar o tonificar tu cuerpo o simplemente tener un estilo de vida más activo puede que estés pensando en apuntarte al gimnasio. Pues este artículo te va a ser de gran ayuda porque te vamos a ofrecer algunos consejos útiles para comenzar a ir al gimnasio de manera segura y exitosa.

  1. Prepárate para el comienzo

El primer consejo que debes seguir sí o sí si vas a comenzar a ir al gimnasio es que te prepares. Primero piensa bien el gimnasio que vas a elegir, ya que seguro que en tu ciudad hay diferentes centros que tienen diferentes características. Por ejemplo, hay algunos centros que solo cuentan con salas de máquinas, otros que también disponen de actividades grupales y otros que cuentan con entrenadores para ayudarte en tus sesiones. Valora todas las opciones y escoge el mejor gimnasio para ti.

También debes tener la ropa adecuada. Debes usar ropa cómoda y transpirable que te permita moverte libremente durante el entrenamiento. Y contar con zapatillas deportivas que proporcionen un buen soporte y amortiguación a tus pies.

  1. Empieza poco a poco

Es importante que no te sobrecargues en tus primeras sesiones de entrenamiento. Comienza con una rutina fácil y ve aumentando gradualmente la intensidad y la duración de tus entrenamientos a medida que te sientas más cómodo y menos cansado. Y es que si te exiges demasiado desde el principio, es más probable que te lesiones o te sientas desmotivado y acabes por perder la ilusión y dejes de ir al gimnasio.

  1. Hidrátate bien

Otro consejo que debes seguir es hidratarte bien. Bebe suficiente agua antes, durante y después del entrenamiento para mantener tu cuerpo hidratado. Porque la deshidratación puede afectar negativamente tu rendimiento y aumentar el riesgo de lesiones.

Además, el agua que bebas durante el entrenamiento se recomienda que no sea fría y se debe beber cada 15 o 20 minutos, nada de beber mucho de golpe en un atracón, tal y como confirma un artículo de El Mundo que puedes leer completo pinchando aquí.

  1. Estira bien antes y después

“Es muy importante estirar bien antes y después de la práctica deportiva siempre, pero todavía más si no se está habituado al ejercicio. Los estiramientos previos permiten calentar los músculos, así se preparan para ejercicios más intensos y se reduce la posibilidad de lesiones. Mientras que los estiramientos después permiten que el corazón vuelva a la normalidad, así como que el cuerpo se enfríe poco a poco”, explican desde Clínicas Vitalfisio, clínicas que cuentan con diferentes especialidades como fisioterapia, podología o medicina estética.

  1. Combina ejercicios de cardio y fuerza

Si quieres ponerte en forma debes combinar ejercicios cardio con ejercicio de fuerza. Nunca te debes enfocar solo en un tipo de entrenamiento. Porque los entrenamientos de cardio ayudan quemar grasa y mejorar la resistencia, mientras que los entrenamientos de fuerza son bueno para desarrollar músculo y contribuyen a mejorar la salud ósea. Así que combina ejercicios de estos dos tipos.

  1. No te exijas más de la cuenta

Nunca te debes exigir más de la cuenta. Debes ser consciente de tus posibilidades y adecuar tus ejercicios a tu situación física. Porque la práctica deportiva es una maratón, no una carrera rápida. Así que ve poco a poco y nunca te exijas más de lo que puedes dar. Plantéate objetivos a corto plazo y asequibles para tu estado de salud actual.

  1. Cuida tu alimentación

Si quieres ponerte en forma no basta con ir al gimnasio, debes también cuidar tu alimentación. Intenta llevar una dieta equilibrada y evitar algunos alimentos como alimentos procesados, alcohol o productos ricos en azúcares.

  1. Descansa bien

El descanso es tan importante como el propio entrenamiento. Permítete tiempo suficiente para recuperarte entre sesiones y no te esfuerces demasiado en los entrenamientos. Además, descansa lo suficiente durante la noche para que tu cuerpo pueda recuperarse y estar óptimo para el siguiente entrenamiento.

  1. Se constante

Por supuesto debes ser constante, ya que es clave para lograr cualquier objetivo en el gimnasio. Establece una rutina de entrenamiento que puedas seguir y haz del ejercicio una parte regular de tu estilo de vida. Y cuando no tengas ganas de ir al gimnasio oblígate un poco porque luego seguro que cuando estés sudando la gota agradeces haber ido.

  1. Confía en ti mismo

Y por último, no debes dejar de confiar en ti. Con constancia y superación podrás ir alcanzando tus objetivos. Y nunca te olvides de disfrutar del camino.

En definitiva, comenzar a ir al gimnasio puede ser complicado, pero con un poco de planificación y mucha voluntad la transición puede ser sencilla.